Por fin llegó el estreno de Lida

Tuvo que poner seis becadas para que pudiera cazarle la primera, pero todo llega, y hoy fue el día. Al fin Lida se estrenó con las becadas, después de dar con una en una zona muy sucia de urces y robles jóvenes, que se equivocó al salir volando por encima de mi.

Mojadura tras mojadura

Menuda temporada pasada por agua, no da tiempo a que seque la ropa de un día para otro.

El sábado a las perdices con David. Toda la mañana detrás de un par de bandos, con muestras de los perros, cagadas frescas y... ni pluma. Sin embargo, entramos en dos pequeñas zonas a ver si había alguna pitorra y en las dos levantamos, no pudiendo tirar a una que luego se nos escabulló en una ladera de escobas y consiguiendo cazar la otra, que sirvió para romper mi mala racha tras una muestra larga de Xana y patrón correspondiente de Lida y Zambra. Por la tarde, ya casi de noche, David consiguió abatir una perdiz que nos pasó por encima como un misil vallina abajo.
El domingo más agua y más fallos. Otras 3 becadas tiradas a muestra de perro y aunque estaban en zonas sucias no hay disculpa, ¡¡¡fallo más que Julio Salinas!!!

El espantapitorras

Ese va a ser mi nuevo apodo si sigo con actuaciones como la de hoy. Por la mañana salí solo con Lida y la cachorra me puso una pitorra por dos veces. En el primer levante le tiré dos tiros fallándola, y en el segundo se levantó larga y no me dio opción. Por la tarde cambié de cazadero y ya saqué a las tres perras juntas. Tres becadas a perro puesto, a las tres un tiro porque la escopeta se me encasquillaba y no me recuperaba el segundo, y las tres vivitas y picoteando, sin conseguir volver a ver a ninguna en la rebusca. Al final me reía por no llorar.

Todavía hay mucha hoja

El sábado pasamos una mañana entretenida, aunque al final no tocamos pluma. 7 levantes a dos pitorras diferentes, pudiendo tirar un tiro a cada una, pero las hojas de los robles se comieron los perdigones. Curioso que a estas alturas ya estén metidas en lo más sucio del monte, será por el tiempo que estamos teniendo, todos los días con aire y lluvia. Lo mejor es que en un par de levantes fue Lida la que puso las pitorras y en casi todos los restantes anduvo en la jugada patroneando y guiando. Ya solo falta cazarle una.
El domingo cambio de cazadero sin ver nada en las tres horas que estuve en el monte.

Aire y primeras pitorras

Menudo fin de semana de aire y frío, con las cumbres ya nevadas. El sábado día de perdices en el pueblo, con David y mi padre. Toda la mañana varios levantes a un bando de 11 y sin llegar a verlas. Con el aire ni nos enterábamos de los levantes, solo muestras de los perros a las gallinazas que dejaban. Mientras tanto nuestro amigo Manuel nos llama para decirnos que acaba de cazarle una pitorra bien puesta por Yara, hija de Xana, a la orilla de un arroyo. La primera de la que sabemos cazada en León esta temporada.

El domingo amanece otra vez con mucho aire y nevusqueando por los altos, así que, animado por la becada cazada el día anterior por Manuel, decido meterme por los arroyos a ver si hay suerte. Después de 3 horas sin novedad, Hera se queda de muestra en una cárcava bastante limpia. Xana la patronea 15 metros por arriba y finalmente llega Lida y patronea 5 metros por debajo. Un minuto eterno sin que pase nada, me muevo un par de metros y eso hace que Lida rompa y se ponga de muestra dos metros por delante de Hera, mientras que Xana da unos pasos y se queda también puesta girando la cabeza a su izquierda. Unos segundos después arranca la pitorra y primera captura de la temporada. ¡¡¡Una gozada!!!